WEB 2.0: LOS PROSUMIDORES

Todo usamos la tecnología, tanto en el ámbito educativo como laboral o en el campo de la vida privada, pero no son muchos los que entienden qué es lo que tecnológicamente se produce con esos datos, cuál es el alcance de esta acción. Con la aparición de la Web 2.0, como actitud o idea, y el software social como herramienta que la materializa, las cosas cambian rápidamente. El acceso a la información mejora y este cambio no solo afecta al dominio de la creación sino que hace todo un paradigma del pensamiento audiovisual, convirtiéndose éste en el lenguaje esencial. En este nuevo paradigma las posiciones de poder, los canales de distribución y los formatos se han diversificado. No se trata solo de la generación Youtube o de la presencia de las Redes Sociales en nuestra cotidianeidad, sino de una revolución estética y política donde ya no existen límites entre creador de una obra, el distribuidor y el consumidor.

Hoy se habla de productores + consumidores = prosumidores en la red. Las personan no solo consumen contenidos en la Web sino que asumen el rol de autores y productores de sus propios recursos. Facebook, Skype, Blogger, Twitter, Youtube, teachertube, Fotolog, Google Docs, son redes sociales que potencian la participación de los usuarios y hacen referencia a las teorías de aprendizaje Constructivistas (Lev Vygostky) y la Construccionista Social (Berger Luckmann), enriquecidas y complementadas con la Conectivista (George Siemens) por sus comunidades de aprendizaje, de práctica y otras herramientas de interacción social.

El prosumidor personaliza el producto que obtiene, posteriormente puede usar esa misma plataforma para crear beneficio personal que no se comparte con el creador de la plataforma original, se pierde el control porque al final se pierde el control de la información, los productos tiene que hacerse de tal forma que sean modificables, de cualquier forma los prosumidores lo van a hacer, después de tomar cierta experiencia uno mismo se puede volver prosumidor, finalmente los prosumidores compartirán el beneficio con todos.

El futuro de los prosumidores es que seguirán avanzando, ya nadie es un ente fijo, todos tiene posibilidad de participación, de comunicar sus necesidades.

El ámbito educativo no puede estar ajeno a este cambio, que permite pasar de ser lectores a autores, a trabajar y aprender de forma colaborativa, a integrar redes sociales, entre otras posibilidades.

Los beneficios del estudiante prosumidor que considero al respecto son:

• Fortalecimiento de la libertad de expresión.
• Son constructores colectivos del conocimiento.
• Cierra la brecha digital generacional y cultural.
• Nos trae más conocimiento disponible como la de las bibliotecas digitales que nos permiten tener acceso a la información, foros masivos en que se intercambian opiniones.
• A través de compartir el conocimiento con nuestras nuevas herramientas tecnológicas, podemos tener más rápida difusión, posibilidad de entrega justo a tiempo, más rápida retro alimentación, sobre el servicio e incrementamos nuestros modelos de proyección a futuro.
• La plataforma de discusión pública, permite intercambiar puntos de vista pero con la opinión de personas en los sitios donde ocurren las cosas y así uno puede leer mas allá de lo que las noticias nos dicen.
• La tecnología digital permite alojar diversos formatos de comunicación: texto, audio, video, etc.
• Acceso a la información libre y global, con diversidad de perspectivas, ideas y opiniones.
• Comunicación, a través de la cual es posible poner en común los conocimientos, saberes, gustos e intereses.
• Comunidad, que favorece el establecimiento de relaciones y el encontrarse con otros en torno a propósitos comunes.
• Cooperación, lo que posibilita generar sinergia en el emprendimiento de acciones conjuntas.
• La información se encuentra –y circula- libremente en internet, lo que motiva el surgimiento de temas derivados para el debate: el libre acceso a la información, la calidad de la misma y su pertinencia. En este punto, los criterios de autoridad adquieren nueva relevancia.

Los riesgos del estudiante prosumidor:

• “La posibilidad del anonimato estimula a crearse distintas personalidades y experimentar con ellas aprovechando la flexibilidad –y seguridad- que ofrecen los ambientes virtuales”, como también, puede conllevar a ser presa fácil de acoso o ciberbullyng.¹
• El ciberespacio les puede proporcionar aventuras al mundo desde su propia habitación y sin salir de su casa con el que pueden tergiversar la información o el mensaje si es que no hay una adecuada interpretación del mismo o de la orientación de una persona mayor (padres o docente).
• La participación en comunidades virtuales, quedan en general, en manos de jóvenes con mayores recursos (conectividad hogareña, PC actualizada).
• Los servicios Web, de la Cultura Libre, presentan una serie de preocupaciones desde la concepción en primer lugar, los términos de licenciamiento que los usuarios deben aceptar cuando suben archivos, generalmente favorecen a la empresa del servicio sin que esto se transfiera a los usuarios; en segundo lugar, no se da a conocer el software o código fuente con el que implementan estos servicios, con lo cual las personas solo pueden usar el servicio pero no aprender acerca de su funcionamiento; en tercer lugar, la gratuidad del servicio y la unilateralidad de los términos de uso, hace que la información de los usuarios pueda ser utilizada con cualquier propósito y en las condiciones y tiempos que la empresa disponga; y en cuarto lugar, estos servicios generalmente promueven la utilización de formatos de archivos con restricciones de patentes, y por tanto no libres.
• “Investigar libremente acerca de cualquier interés, preocupa en primer lugar a familias, empresas y gobiernos, que buscan, de un modo u otro, restringir esta amplitud, si bien por diferentes razones, más o menos legítimas, en un caso u otro. La exposición a una amplia gama de ideas y formas de actuar en el mundo implica, sin dudas, beneficios, pero, al mismo tiempo, riesgos. En su viaje hacia el conocimiento de nuevos mundos, las necesidades de información para los jóvenes son relevantes, y en internet esta todo, lo que incluye información calificada para el desarrollo de la ciudadanía juvenil, como ayudas de orientación vocacional y para la formación profesional, la protección frente a las relaciones sexuales, el aborto, etc., pero también, pornografía, drogas, métodos de infligir violencia, y tanto más”.

Es por ello que, frente a este panorama, surge una nueva tarea, la de preparar a los jóvenes para filtrar, seleccionar y procesar la información, a diferencia de ayer, cuando se trataba, "simplemente", de salir a buscarla ya que, frecuentemente, era escasa. Por otra parte, los jóvenes siempre hallarán el modo de obtener la información que buscan, más allá de programas de filtrado o censuras. Es así que el reto de los docentes hoy es promover en sus estudiantes, las competencias y destrezas necesarias para la búsqueda y procesamiento de dicha información hasta convertirla en conocimiento significativo.